Algunas veces nos inunda el silencio, ese que dice todo cuando las palabras no son lo suficiente, ese silencio que enfría todo y se atreve a decir lo que nosotros ignoramos y escondemos sin pensar. Algunas veces nos inunda el silencio y simplemente ya no sé cómo actuar y es que la realidad es que lo odio tanto.
El silencio me incomoda, me hace sentir vacía, me hace sentir insuficiente. En el silencio no encuentro a la persona que trato de ser, lo que quiero mostrar, en el silencio solo somos vos, yo y mis pensamientos y la verdad es que algunas veces no los sé manejar.
El silencio me incomoda, me aterra, me enfría y odio el frío.
Y tal vez también me odio a mi.
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